Capítulo N° 00164 - Tradición

A Yang Kai no le importaba intercambiar su Habilidad Marcial de la Explosión del Sol Ardiente con la Habilidad de otro discípulo. Pero el Pabellón del Cielo Alto no permitía hacer esto en privado. Así que decidió irse.

Entonces, una fría voz lo llamó. "¡Yang Kai!"

Cuando volvió su cabeza para ver quien era, frunció el ceño ligeramente. El hombre tenía al menos veintisiete años. Lo reconocía, su nombre es Cao Zheng Wen. Hace varios meses, ordenó que Yang Kai, Li Yun Tian y el resto fueran arrojados a prisión. Sacó algo de su bolsillo y caminó con indiferencia hacia Yang Kai.

"Hermano mayor, ¿qué sucede?"

Cao Zheng Wen resopló, no se molestó en hablar y arrojó una carta las manos de Yang Kai. Él la atrapó. Entonces, torció sus labios. Había puesto energía oscura en la carta, pero Yang Kai la eliminó con facilidad.

"¿Qué es esto?" Preguntó, mientras miraba la carta.

"¡Un comando para tu promoción!" Dijo seriamente. "Los Ancianos decidieron promocionarte después de llegar al Reino Fundación Inicial. Según las reglas del Pabellón Cielo Alto tienes el derecho de ser promovido de un discípulo de prueba a un discípulo ordinario".

Yang Kai frunció el ceño. "¿Una promoción?"

"Sí" Asintió. "Has estado aquí durante tres años atrapado en el Reino Cuerpo Templado, por lo que tu rango era el de un discípulo de prueba. Pero debido a tu cultivación diligente has llegado al Reino Fundación Inicial. ¡Como tal, los Ancianos te han dado la oportunidad de ser promovido!"

"¿Una oportunidad?" Se dio cuenta de que había un significado subyacente en estas palabras.

Le explicó. "Si completas la tarea que te encomendará el Consejo de Ancianos, serás promovido. Es un gran honor tener este tipo de oportunidad. Además es muy raro que ellos ofrezcan algo como esto, así que debes aprovecharlo. En cuanto a si lo consigues o no, dependerá de tus habilidades y de tu suerte".

"No estoy interesado" Agitó su mano y tiró la carta.

La expresión de Cao Zheng Wen cambió cuando recogió la carta del suelo, rugió ferozmente. "¡Yang Kai! ¡Esta es una orden del Consejo de Anciano! ¡No te atrevas a rechazarla!"

"¡¿Por qué debería importarme el Consejo de Ancianos?!" Impaciente lo reprendió. "Nunca he pedido un ascenso, además deseo permanecer como discípulo de prueba. ¿Desean forzarme a una promoción en ese caso?" Sabía que la tarea que le encomendarían no sería fácil. Es posible que debiese enfrentar un gran peligro y no estaba dispuesto.

"Entonces, ¿te sientes cómodo siendo parte de la mediocridad?" Sonrió burlonamente. La carta la debería haber entregado luego de que Su Yan lo rescató, pero no lo encontró después ya que Yang Kai estuvo en el valle y después en la Herencia de la Cueva del Cielo.

"Mi mediocridad no la definen personas como tú" Sonrió mientras se alejaba.

"¡Yang Kai!" Rugió atrayendo la atención innecesaria del resto de discípulos. "¡No creas que porque tuviste la oportunidad de entrar en la Herencia de la Cueva de Cielo puedes comportarte como el dueño de este lugar! ¡Ya que te atreves a ignorar la orden del Consejo de Ancianos, conocerás las consecuencias!"

"¡Atrevete!" Yang Kai se giró para mirarlo. Inmediatamente una energía demoníaca emergió de su rostro.

Cao Zhen Wen palideció. Cuando logró recuperar su compostura Yang Kai había desaparecido.

El resto de discípulos permanecieron callados mientras observaban la escena. Todos estaban sorprendidos por la declaración de rechazo de Yang Kai. Nadie esperaría que ignorase al Consejo de Ancianos. Esto era impensable para ellos. Siempre consideraron las palabras de los Ancianos como la guía que debían seguir. Independiente de los peligros y dificultades que eso conlleve. Ninguno tendría la más mínima inclinación de rebelarse, ni siquiera en sus mentes. Pero justo entonces, presenciaron como un discípulo de prueba hacía lo que era impensable para ellos. "[¿No tiene una pizca de respeto por los Ancianos? ¿No está arriesgando su propio pellejo?]" Muchos lo miraban con un toque de admiración. Otros se sentían muy molestos. Pensaban que tal vez estaba cómodo con su estatus social, de ahí su negativa a la promoción.

Por otro lado, la tez de Cao Zheng Wen seguía pálida mientras estaba parado en el mismo lugar, inmóvil, con la carta en la mano. Aunque estaba molesto, también se sentía vació por dentro. El Gran Anciano le había ordenado personalmente que le entregase la carta a Yang Kai. Su curiosidad también se apoderó de él así que le hecho un vistazo. [Tarea: Viaja solo a las Tierras del Mal de la Nube Gris Ceniza y mata a un cultivador de un rango no más bajo que el tuyo] Esta tarea puede clasificarse como fácil y difícil al mismo tiempo.

En ese lugar hay innumerables cultivadores malvados. Si Yang Kai se encontraba con alguno de su mismo nivel, la tarea es fácil. Sin embargo, existe una gran posibilidad de que se encuentre a otros mucho más fuertes, tan fuertes como un Anciano, en cuyo caso probablemente moriría. Cao Zheng Wen pensaba que Yang Kai aceptaría la tarea. Nunca esperó que fuese lo suficientemente valiente como para rechazar una orden del Consejo de Ancianos frente a tantos discípulos. ¿Cómo podría decirles que había fallado en una misión tan simple? No se movió durante mucho tiempo. Reflexionaba entre la multitud para finalmente abandonar el lugar rechinando los dientes.

Yang Kai no se sentía mejor. Reunirse con él también lo alteró. "[Si no me hubiera enviado a este lugar nunca me hubiese molestado en viajar tan lejos. ¿Por qué tuvo que enviarme aquí? ¿Qué relación tiene con el Pabellón Cielo Alto?]" Después de pasar tres terribles años en la escuela, llenos de inconstancia y crueldad de la gente se sentía fuera de lugar. Por ahora, solo Su Yan le había otorgado calidez. Mientras seguía pensando recordó a Xia Ning Chan. "[Si, mi hermanita mayor, ella también]"

Mientras caminaba pensando profundamente, alguien corrió hacia él, dejando una estela de fragancia. "¡Hermano menor Yang!" Sus pensamientos se interrumpieron para mirar, era Lan Chudie.

Aunque tuvo una mala experiencia dentro de la Herencia de la Cueva del Cielo junto a ella, sus tratos no fueron agradables ni desagradables, para él, ella nunca lo provoco, simplemente se mantuvo al margen. Además valoraba el trabajo en equipo. "Hermana mayor Lan".

Lan Chudie sonrió mientras sus voluminosos pechos se agitaban al jadear. Como si no hubiera podido olvidar todo lo que pasó antes, miró a Yang Kai y le dijo. "Pensé que nunca querrías hablarme".

"No haría eso, hermana mayor, siempre te tendré en cuenta". Le devolvió la sonrisa.

Sus ojos se iluminaron al escucharlo. "Me equivoqué cuando estábamos dentro de la Herencia de la Cueva del Cielo, pero, ¿podrías perdonarme?" Lan Chudie era una mujer inteligente que no hablaba sin ninguna reserva.

Yang Kai no era una persona tan mezquina como para que le importasen esas cosas. Incluso si ella no le decía nada al respecto. Sin embargo, cuando se disculpó, pudo sentir que la mala impresión que tenía de ella disminuyó un poco. Mantuvo su sonrisa amistosa mientras sacudía su cabeza. "Hermana mayor, pensé que me hablarías de algo más serio".

"Hermano menor, cuando lo dices de esa manera, me haces sentir muy a gusto". Ella palmeó su pecho mostrando una expresión relajada. Como si una gran piedra hubiese sido levantada de su corazón. Sin embargo, repentinamente frunció el ceño. "Hermano menor, ¿no fuiste demasiado imprudente al rechazar una orden del Consejo de Ancianos? Podrías tener muchos problemas".

"Cao Zheng Wen ya dijo que estoy contento de ser una persona mediocre, ¿pará qué molestarme en cambiar algo?" Lan Chudie quiso responderle pero Yang Kai la interrumpió abruptamente. "No me siento bien hoy como para seguir hablando, perdón, nos vemos".

Ella se sobresaltó y solo asintió con una sonrisa. Al ver la expresión de Yang Kai supo que lo decía en serio. Aunque él le habló en un tono amable era probablemente que lo irritase si seguía con la conversación. No quería causarle ese malestar.

Después de que se despidió de Lan Chudie, Yang Kai regresó a su cueva. Descubrió que Xia Ning Chan se había ido. Miró a su alrededor y encontró dos nuevos árboles. Eran unos bonitos bonsai. Le resultaron familiares, luego recordó que los había visto en la Sala de Contribuciones. Meng Wu Ya se ocupaba de ellos, pero al parecer Xia Ning Chan los trasladó hasta aquí.

Mientras tanto, una gran ola de chismes se expandía por todo el Pabellón Cielo Alto. De vuelta en el lugar donde los ancianos se reúnen, Cao Zheng Wen le explicó al Gran Anciano la frustrante situación de esta mañana.

Al escucharlo Wei Xi Tong casi se ahogó con su té. "¿Realmente lo rechazó?" El Gran Anciano había pensado en innumerables posibilidades, pero nunca esperó que el chico se negara.

"Sí" Cao Zheng Wen respondió torpemente. "No solo lo rechazó. Se atrevió a calumniar sobre la dignidad del Consejo de Ancianos frente a muchos discípulos. Gran Anciano, después de mostrar esa poderosa Habilidad Marcial dentro de la Herencia de la Cueva del Cielo se volvió arrogante. De lo contrario, ¿como tendría las agallas para faltar así el respeto? Debe ser castigado por su insolencia, de lo contrario, otros seguirán su ejemplo".

"¡Cállate!" Golpeó la mesa y lo miró. "¿Cómo te atreves a informarnos sin haber completado la tarea que te encomendamos? ¿Intentaste forzarlo?"

Su mente quedó en blanco, no podía entender los pensamientos del Gran Anciano. "[¿Por qué tendría que intimidarlo? ¿Eso no me haría quedar mal? Del mismo modo como él lo rechazó, ¿no es una oportunidad para darle una lección? Gran Anciano, no entiendo por qué estás pasando por tantos problemas por él]" Cao Zheng Wen estaba confundido, pero permaneció en silencio por miedo a seguir empeorando las cosas.

"¡Regresa! ¡Haz cualquier cosa para que acepte la orden! ¡Debe aceptarla! ¡Incluso debes arrodillarte de ser necesario!" Gruñó

Estaba perplejo. "[¡¿Se supone que debo arrodillarme y rogarle que acepte la orden?!]"

"¡¿Qué estás esperando?!" Golpeó su palma contra la mesa, levantando una nube de polvo.

"¡Sí!" Respondió apresuradamente y se retiró inmediatamente.

Mientras tanto, en los aposentos del Segundo Anciano. Su Xuan Wu estaba sentado con las piernas cruzadas frente a un tablero de ajedrez con piezas blancas y otras negras. Los negros llevaban la ofensiva atacando brutalmente a los blancos, pero estos tenían defensas impenetrables. Era una partida muy tensa, cualquier error le daría la victoria al otro.

Entonces, un discípulo entró apresuradamente para informarle sobre el incidente.

Su Xuan Wu no pudo evitar poner una cara extraña. "¿Se negó?"

El discípulo respondió. "Si, ¡lo rechazó rotundamente!"

No sabía como reaccionar, finalmente se río. "¡Esto si que es bueno! ¡Su rechazo es muy bueno. Hermano mayor, sería estúpido de tu parte levantar una roca que podría caerte luego en el pie".