Capítulo N° 00361 - Águila Real

La Secta de Sangre y la Casa de la Tormenta sufrieron mucho los últimos meses. Solo quedaban una docena de los cien discípulos que habían venido, por lo que todos los sobrevivientes estrecharon vínculos extremadamente firmes. Al ver como Nan Sheng y Xiang Chu trataban a las hermanas Hu como productos baratos que se podían comprar y vender, estaban muy enojados. Fang Ziji interrumpió la conversación. "Joven Señor Nan, Joven Señor Xiang, ¿las Familias de primera clase son libres de determinar si nosotros, los discípulos de segunda clase, vivimos o morimos?"

"¿Que quieres decir?" Nan Sheng murmuró mirándolo fríamente.

"Solo quería confirmarlo, si es así, no tengo nada que decir".

"¡Entonces cierra la boca!" Se sacudió el polvo de las mangas y continuó. "Si quieres culpar a alguien, entonces cúlpate a ti mismo por no haber nacido en otro lugar. ¿Por qué crees que las Sectas y las fuerzas del mundo se dividen en primera, segunda y tercera clase? ¡Es para que sus miembros entiendan la diferencia entre nosotros! Si pertenecieras a una fuerza de primera clase, ¿crees que tendrías que soportarme?" Se burlaba mientras hablaba, aparentemente no tenía ningún problema con lo que estaba diciendo. Su aire de superioridad era obvio debido a su noble nacimiento. "Si pertenecieras a una de esas fuerzas, ¡tendría que inclinarme ante ti! ¡Esa es la ley! Es divertido que no puedas entender algo tan simple. Algún día, si llegas a tener un estatus o una fuerza por encima de la mía, si me intimidas, ¡juro que no tendré ninguna queja!"

"Habrá tal día" Fang Ziji dijo sombríamente.

Nan Sheng en respuesta, lo miró con desdén.

Todo este tiempo, Yang Kai simplemente miraba sin decir nada. Con las manos detrás de su espalda, observaba en silencio como todos discutían, sin molestarse en expresar su opinión. Era como si todo lo que sucedía no tuviese nada que ver con él. Sin embargo, estaba claro que los cuatro guardias del Reino Ascensión Inmortal lo miraban constantemente. De todos los miembros más jóvenes, solo Yang Kai era digno de su atención. A pesar de que su cultivo solo esté en la Sexta Etapa del Reino Fundación Pura, la intensidad de su Fuerza de Sangre y la potencia de su Verdadero Qi son asombrosos, por lo tanto era imposible determinar cual era su verdadera fuerza.

El propósito de Yang Kai al observar en silencio, era ver cuántas personas de las presentes podía considerar como amigos. Como dice el refrán, solo un camino distante puede probar la fuerza de un caballo. Para conocer a alguien, se necesita pasar mucho tiempo con ellos. Solo en momentos de crisis, las personas mostrarán su verdadero carácter y temperamento. Si los discípulos de la Secta de Sangre y de la Casa de la Tormenta permanecieran en silencio y decidieran no involucrarse, no se sorprendería. Con el fin de protegerse, era lo más inteligente que podían hacer. Si intentaban resistirse, solo traerían la desgracia sobre sí mismos.

Sin embargo, los tres con los que contaba no lo decepcionaron. Ni las hermanas Hu ni Fang Ziji dudaron en lo más mínimo en pararse frente a él a pesar de la gran disparidad entre sus fuerzas. Con esta calidez en su corazón, Yang Kai sonrió y caminó lentamente hacia el frente, extendió sus manos hacia los hombros de las hermanas Hu. Luego barrió con la mirada a los cuatro guardias y finalmente se enfocó en los dos Jóvenes Señores. Les susurró suavemente a las hermanas. "No se preocupen por mí, si quiero irme, nadie aquí es capaz de detenerme".

Al escuchar estas palabras, las delicadas expresiones de Hu Jiao Er y Hu Mei Er se relajaron de repente. Aunque no entendían de dónde venía la confianza de Yang Kai, por su tono firme y constante en su voz, no dudaron de él.

Por otro lado, las caras de Nan Sheng y Xiang Chu se hundieron.

Fang Lao dejó escapar un resoplido despectivo. "Pequeño mocoso, con los cuatro aquí, ¿todavía te atreves a alardear tan descaradamente?"

"¿Quieres probarme?" Yang Kai se burló provocativamente.

Los ojos de Fang Lao brillaron peligrosamente mientras lo miraba, pero para su sorpresa, no vio las más leves señales de pánico en la expresión de este extraño joven. No importa cuán absurdo sonara, parecía que este chico realmente tenía la fuerza para escapar de aquí con seguridad.

"¡Rodéenlo!" Gritó enojado Nan Sheng. La actitud distante de Yang Kai y sus palabras arrogantes lo irritaron al extremo. Nunca un discípulo de una Secta de segunda clase lo había mirado así. Su mirada era como una cuchilla afilada pinchando su corazón. Como el Joven Señor de una reconocida Familia de primera clase, este sentimiento incómodo atentó contra su orgullo. En el instante que dio la orden, los dos maestros detrás de él volaron y aterrizaron a las espaldas de Yang Kai, formando un estrecho cerco con los dos guardias de la Familia Xiang.

Sin embargo, incluso rodeado por cuatro maestros del Reino Ascensión Inmortal, de la Séptima u Octava Etapa, Yang Kai todavía parecía tranquilo y relajado, solo sus ojos se estrecharon ligeramente, símbolo de su seriedad. En su estado actual, lo mejor que podía hacer era huir, pero como debía enfrentarse a cuatro, tendría que pagar cierto precio para retirarse. Por supuesto, todo eran suposiciones, probablemente las cosas se desviarían de sus expectativas al intentarlo. Pero si no lograban matarlo de un solo golpe, tenía la confianza de poder escapar.

"¡Vamos corre! ¡Veamos cómo escapas ahora!" Nan Sheng se burló en un tono arrogante. "¡Cuatro Ancianos, si estos discípulos de las Sectas de segunda clase intentan interferir, no se contengan!"

"¡Si Joven Señor!" Los cuatro maestros del Reino Ascensión Inmortal respondieron.

Un fuerte rugido sonó cuando el dragón demoníaco que se cernía detrás de Yang Kai lentamente comenzó a dar vueltas alrededor de él. Sus ojos negros y fríos miraban a los cuatro viejos.

Nan Sheng desvió la mirada hacia los discípulos de la Secta de Sangre y de la Casa de la Tormenta. Sonriendo les ordenó. "Les daré diez segundos para alejarse de este demonio, de lo contrario..."

Xiang Chu frunció el ceño e interrumpió rápidamente. "Jiao Er, Mei Er, no sean obstinadas".

"¡Estas yendo demasiado lejos!" Hu Jiao Er gritó con odio.

Al escucharla su expresión se enfrió. Realmente quería tener a las hermanas Hu, pero tampoco es que no importaba el costo, como un Joven Señor de una Familia de primera clase, podría tener a cualquier mujer hermosa que desease. Estas bellas flores gemelas eran más una especie de diversión que otra cosa, le gustaba el proceso de perseguirlas y conquistarlas. Pero después de todos estos eventos, Xiang Chu gradualmente se dio cuenta que nunca podría conquistarlas, lo que le causó frustración y enojo en su interior. Su ira rápidamente se convirtió en resentimiento, hasta que finalmente dejó escapar un resoplido frío, ya no tenía intención de seguir molestándose con este juego.

"¡Los diez segundos han terminado!" Declaró Nan Sheng mientras barría a la multitud. "¡Comiencen!" Los cuatro maestros empujaron sus Verdaderos Qi.

Justo en ese momento, el feroz rugido de un águila resonó. Este grito fue extremadamente penetrante y parecía contener una especie de poder inexplicable y misterioso. Incluso los cuatro maestros del Reino Ascensión Inmortal se detuvieron y levantaron la vista apresuradamente. En lo alto del cielo, a más de mil metros de altura, una pequeña luz dorada parpadeó. Este destello era incomparablemente brillante, como si fuese la luz solar, era muy difícil de contemplarla sin apartar los ojos. Mientras daba vueltas en el cielo, seguía rugiendo. La expresión de Yang Kai era extraña, fluctuaba constantemente mientras miraba. La tensa escena en la que se encontraba, fue completamente perturbada por esta criatura.

"¡Qué maravilloso! ¡Un Águila Real!" Nan Sheng gritó. Aunque esta Bestia se encontraba a más de mil metros por encima de ellos, aquí nadie era una persona común. La vista de un cultivadores les permitía distinguir claramente la apariencia del ave de rapiña.

"Un Águila Real..." Xu Lao frunció el ceño mientras intentaba recordar algo.

"Jajaja lo he decidido, ¡debo capturar a esta Bestia y llevarla conmigo!" Declaró en voz alta. Si poseyera un águila tan llamativa y majestuosa, definitivamente sería algo de lo que podría jactarse. Además, si podía criarla y entrenarla, en el futuro sería de gran utilidad para él.

Yang Kai sonrió sarcásticamente. "No puedes permitírtelo".

Nan Sheng lo miró casualmente y sonrió sin decir nada. Se volvió hacia sus guardias y preguntó. "¿Alguna vez han oído hablar de semejante bestia?"

Xu Lao todavía intentaba recordar. "Creó haber oído hablar de eso en alguna parte..."

"¿Dónde lo escuchaste?" Xiang Chu también estaba interesado.

Frunció el ceño y pensó mucho, pero no podía recordarlo.

En lo alto del cielo, los rugidos del Águila Real se volvieron más feroces e intensos, como si hubiese encontrado algo que llamase su atención. Inmediatamente después, como un rayo de luz dorada, se zambulló hacia donde estaba la multitud reunida.

Nan Sheng no tenía idea de como poder capturarla, pero al ver que ella descendía por su propia voluntad se alegró. "Interesante, ¿después de solo conocerme desea servirme?"

Xiang Chu sonrió. "El encanto del hermano Sheng no tiene rival, no competiré por ella".

Asintió felizmente y miró a Yang Kai. "Mocoso, parece que podrás vivir un poco más. Solo siéntate y espera hasta que atrape a esa águila".

"¡Adelante!" Yang Kai se encogió de hombros y aflojó su postura.

"¡Aprovecha esta oportunidad para escapar!" Hu Mei Er le susurró en voz baja.

Sin embargo, él simplemente sacudió la cabeza y sonrió.

"¡¿Qué haces?!" Hu Jiao Er lo regañó ansiosamente. "¡Si realmente te quedas hasta que atrapen a esa criatura, definitivamente estarás en peligro otra vez!"

"No se preocupen, es imposible que lo hagan". Se rió ligeramente.

Ambas lo miraban preocupadas, no entendían por qué trataba de presumir.

Un momento después, el águila dorada ya se había acercado a la multitud y cuando estaba a solo una docena de metros de altura, Nan Sheng voló repentinamente. Su rostro estaba lleno de anticipación y extendió su mano para intentar golpearla. Sin embargo, la Bestia no solo era atractiva, su fuerza tampoco era baja, evitó fácilmente el ataque y contraatacó con un rayo de luz dorado. Inmediatamente, el Joven Señor esquivó apresuradamente y gritó con entusiasmo. "¡Es una Bestia Demoníaca del Quinto Reino! ¡Xu Lao, Fang Lao, ayúdenme!"

Una Bestia Demoníaca del Quinto Reino voladora es un tesoro verdaderamente raro. Una criatura de ese Reino no es particularmente valiosa, pero las que podían volar eran otra historia. Si se utilizaban para explorar el campamento de un enemigo o para rastrear su ubicación, podría darle a su dueño una ventaja decisiva, sin mencionar que también se podía considerar como un maestro en combate. Si pudiese atraparla, la fuerza de su Familia aumentaría enormemente.

Después de ver cuán grande era la fuerza del águila, Xiang Chu se lamentó en secreto de haber sido tan generoso en este momento. Tal criatura valía mucho más que una infinidad de Tesoros Preciosos, pero ya era demasiado tarde, sabía que no podía robársela a Nan Sheng, por lo que no tuvo más remedio que observar en silencio.