Capítulo N° 00792 - Tierra Santa

Hermosos paisajes a su alrededor, Energía del Mundo extremadamente densa, barreas sutiles y formaciones esparcidas dentro y fuera de las montañas circundantes, aíslan esta enorme área del mundo exterior. ¡Esta es la Tierra Santa de los Nueve Cielos! Esta antigua Fuerza ha existido durante incontables siglos, dejando atrás una historia ilustre. Tienen un poder sobresaliente y muy pocas Sectas en todo el Reino Tong Xuan se le pueden comparar. Sin embargo, cuando Yang Kai llegó, sintió que está sumida en una atmósfera sombría, probablemente debido a que el Maestro Santo ha muerto y que su reemplazo aún no ha aparecido.

Al igual que la Secta Cielo Alto, está ubicada en una cadena montañosa, pero a diferencia de la Formación de Cien Cimas, la Tierra Santa de los Nueve Cielos solo tiene una Formación de Nueve Cimas. Aunque este número es relativamente pequeño, la disposición de estas nueve montañas está alineada a la perfección con el Dao Celestial, por lo que esta Matriz Espiritual no es menos poderosa que la de la Secta Cielo Alto, por el contrario, es muy superior. En medio de estas cimas espirituales, se aprecian hermosos palacios, quienes le proporcionan refugio a más de diez mil discípulos. Todo el lugar parece un paraíso, rebosante de vida y vitalidad.

Cuando Xu Hui y los otros tres ancianos llegaron, no se molestaron en esconderse y en cambio, aterrizaron justo al centro de la plaza central, como si intentaran anunciar su presencia. Luego, el Gran Anciano los guió hacia un magnífico palacio. A ambos lados del camino, un gran número de discípulos se apresuraron a saludar respetuosamente a los cuatro Santos y cuando vieron a An Ling Er, todos la saludaron con entusiasmo y expresiones casi fanáticas, independiente de si fueran hombres o mujeres, viejos o jóvenes. Finalmente, frente al único rostro desconocido de Yang Kai, se mostraron bastante curiosos. Un hombre tan joven siendo escoltado respetuosamente por los Ancianos de la Secta, les hizo fácil determinar su identidad. Los susurros se extendieron de inmediato y varios señalaron en silencio a Yang Kai, discutiendo animadamente si es o no el Maestro Santo que la Dama Santa a encontrado, revelando expresiones de emoción.

Al parecer comenzaron a depositar sus esperanzas en él, pensando que si tiene éxito, la Tierra Santa de los Nueve Cielos se salvará. Incluso, algunos ahuecaron respetuosamente sus puños y se inclinaron ante Yang Kai. Sin embargo, él no mostró respuesta, permaneciendo tan indiferente como siempre. Los cuatro Santos asintieron en secreto al ver esto, aumentando mucho más su evaluación. Aunque Yang Kai sigue siendo muy joven, lo trajeron deliberadamente por este camino para que experimentara la riqueza y prosperidad de Tierra Santa, así como para que evaluara la fuerza de los discípulos. Sin embargo, incluso frente a todo esto, no mostró ningún signo de pánico o nerviosismo, simplemente permaneció perfectamente tranquilo, como si ya hubiese experimentado algo así antes, lo que les permitió a estos maestros admirarlo. ¡Su fuerza mental y su temperamento son extraordinarios! Es por eso que estos cuatro viejos intercambiaron miradas en silencio, volviéndose aún más decididos a hacer que herede la posición de Maestro Santo.

Todo el camino estuvo lleno de ajetreo y bullicio. Unos momentos más tarde, llegaron a un gran palacio construido en piedras preciosas, con muchas columnas magníficas en las que hay tallados dragones y fénix. Cuando llegaron aquí, Xu Hui se dio la vuelta y agitó su mano suavemente. Los discípulos que estaban mirando, luego de ver esto, se dispersaron rápidamente, cada uno de ellos todavía con mucha curiosidad y dudas en sus corazones, preguntándose si este joven heredará o no el puesto de Maestro Santo, salvando a su Secta de esta catástrofe. "Pequeño, por favor" El Gran Anciano bajó levemente su cabeza de manera respetuosa.

Yang Kai suspiró de mala gana y frunció el ceño. "Mayor, simplemente he venido a Tierra Santa como un invitado, no es necesario que sea tan formal conmigo".

Al escucharlo, entendió que todavía se muestra reacio, por lo que sonrió y asintió. "Lo que dice es verdad, está bien, vamos juntos entonces".

"Bien"

Una vez dentro del palacio, bajo la disposición de Xu Hui, todos se sentaron alrededor de una magnífica mesa y pronto trajeron un gran banquete. Durante la comida, Yang Kai no se mostró nervioso ni ansioso, como si fuese un invitado ordinario. Intercambió algunos brindis con el Gran Anciano y descubrió que es bastante fácil llevarse bien con él, siempre y cuando no mencionara nada sobre el Maestro Santo. El cultivo de Xu Hui es alto y su experiencia es vasta, pero sigue siendo amigable y accesible, sin embargo, Yang Kai supo que lo está haciendo para establecer una buena relación. Si fuese otro joven, es probable que no se comporte de la misma forma.

Mientras servían el vino, llamaron a un grupo de mujeres jóvenes las cuales interpretaron varias canciones y bailes. Todas estas chicas son bastante hermosas y visten ropas delgadas, pero de buen gusto, lo suficiente para tentar a cualquier hombre. Con una variedad de temperamentos, todas mostraron gracias refinadas, siendo un espectáculo para la vista. Yang Kai miró sus actuaciones, pero su visión siempre se mantuvo clara, sin rastros de obscenidad. Sentada a su lado, An Ling Er vio esto y sonrió con satisfacción y alegría. Después de un poco de emoción, el banquete terminó y los cuatro Santos se despidieron, sin mencionar ni una sola vez el tema del Maestro Santo. Antes de irse, le pidieron a una sirvienta que llevara a Yang Kai a una habitación.

Un momento después, fue llevado a una gigantesca habitación con el piso cubierto por lujosas alfombras y con paredes decoradas con piedras exquisitas, las cuales proporcionan una iluminación suave. Mientras que el quemador de incienso en el centro, desprende un suave aroma que causa relajación. "Joven Señor, ¿quiere bañarse? Hay una gran piscina en la habitación contigua con agua tibia ya preparada". Preguntó la sirvienta.

Yang Kai la miró brevemente antes de sacudir la cabeza e indicarle que se fuera. La sirvienta asintió cortésmente, hizo una reverencia y luego se retiró. Luego de esperar que la joven se fuera, Yang Kai se acercó a la puerta y la abrió, encontrándose con An Ling Er quién estaba con una expresión vacilante esperando afuera. "¿Qué haces parada aquí? Entra".

"Ah... si...." Asintió y entró lentamente.

"Llegaste en el momento adecuado, quería hablar contigo sobre algo" Le tomó la mano y la acercó a la cama. An Ling Er se sonrojó ligeramente pero no opuso resistencia, simplemente dejó que Yang Kai la guiara. Un momento después, se sentó al borde de la cama con una expresión nerviosa, pero aún así mantuvo la calma. Yang Kai también se sentó y la miró sonriendo con amargura. "Ese Xu Hui me mostró a sus discípulos y luego envió a un grupo de bailarinas para seducirme. Esto me está haciendo pensar que obviamente no tiene buenas intenciones".

"El Gran Anciano solo quiere que heredes la posición de Maestro Santo, ¿por qué haces parecer que su actitud es tan insidiosa? Además, esas chicas no son simples bailarinas, todas son excelentes discípulas que han pasado por un estricto proceso de selección. Solo cuando llegan los invitados más distinguidos se les solicita su presencia". Se mordió el labio suavemente con un poco de resentimiento. "¿Realmente no quieres convertirte en el Maestro Santo?"

"¡Claro que no!" Negó firmemente con su cabeza antes de fruncir el ceño. "Dime honestamente, ¿es realmente cierto lo que dijo Xu Hui antes?"

"¿Qué cosa?"

"Que ya no puedes elegir a otra persona"

"Es verdad" Asintió suavemente.

"Tu Tierra Santa es demasiado extraña. Independiente de lo que pienses, solo soy un extraño. ¿Cómo podrían cederme una posición tan importante? ¿Por qué no seleccionan a un discípulo o a alguien relacionado directamente con tu Secta?"

Sonrió suavemente. "Esta ha sido nuestra costumbre desde la antigüedad. Ya oíste que todos los Maestros Santos provienen del exterior, ¿no?"

"Si"

"Si bien es básicamente cierto, hubo una excepción... Si no recuerdo mal, los registros antiguos afirman que hace novecientos años, el nuevo Maestro Santo era en realidad un discípulo de Tierra Santa. En ese momento, varias Damas Santas reaccionaron ante él, por lo que fue elegido, pero desde entonces, tal situación no ha vuelto a ocurrir. Haa... si realmente pudiésemos elegir a un discípulo, nosotras no tendríamos que salir a buscar candidatos, entonces, Xiao Lian y mis otras hermanas..." Al recordar lo que sucedió, sus ojos se llenaron de lágrimas.

"Lo siento..." Tartamudeó tontamente sin saber cómo consolarla.

Se frotó los ojos y respiró hondo antes de continuar. "Ya que insistes en no convertirte en el próximo Maestro Santo, entonces yo te ayudaré a convencer al Gran Anciano y a los demás".

"No es necesario, solo perderás el tiempo" Sacudió la cabeza. "Ya determinaron que soy el único candidato posible, así que sin importar lo que digas, no funcionará".

"Entonces, ¿qué vas a hacer?"

"No lo sé..." Suspiró impotente. Aunque Xu Hui no estaba presionándolo directamente, tampoco se rendirá, por lo que le está causando un gran dolor de cabeza. Si no fuese porque la vida de cada Maestro Santo fuese tan corta, Yang Kai probablemente no tendría problemas en heredar el puesto. Pero este inconveniente es suficiente para desanimarlo.

An Ling Er se mostró avergonzada y frunció el ceño antes de susurrar. "Independiente de cualquier cosa, deberías quedarte aquí por un tiempo. Después de todo, la Dama Santa Nan sigue allá afuera, por lo que no es seguro que te vayas todavía. Espera unos días y luego vuelve a analizar la situación con calma, yo apoyaré cualquiera que sea tu decisión".

"Bien, al parecer es mi única opción" Asintió. "¿Podrías enviarle un mensaje a la Secta Cielo Alto para indicarles que me encuentro bien? No quiero que se preocupen".

"Transmitiré tu mensaje de inmediato" Asintió.

"Gracias".

"No necesitas ser cortés conmigo..." Sonrió y su estado de ánimo mejoro ligeramente. Se puso de pie antes de hablar. "Entonces, descansa por ahora, me iré mientras tanto. Si necesitas algo, dímelo, haré que Xu Hui lo arregle para ti".

Después de que An Ling Er se fue, la expresión de Yang Kai se volvió solemne mientras liberaba silenciosamente su Sentido Divino hacia su entorno. Como lo esperaba, había una gran cantidad de maestros escondidos afuera vigilando sus movimientos. Se rió disimuladamente y no le importó, después de todo, es obvio que Xu Hui haría tales arreglos. Sin embargo, no tiene planes de dejar la Tierra Santa de los Nueve Cielos por el momento. Tal como dijo An Ling Er, la Dama Santa Nan sigue afuera, así que dejar la seguridad de la barrera de las nueve cimas, sería caminar hacia una trampa mortal. Antes de que pudiese encontrar una forma práctica para evadir a esa poderosa maestra, no quiere actuar precipitadamente. Además, las personas de este lugar no tienen intenciones maliciosas hacia él, simplemente quieren que asuma el puesto de Maestro Santo. Si continúa negándose, no tendrán forma de obligarlo. En resumen, es una batalla de voluntades.

Es por eso que Yang Kai determinó que aprovechará esta oportunidad para consolidar su cultivo después de su avance reciente. Habiendo decidido su curso de acción a corto plazo, su estado de ánimo mejoró significativamente y se preparó para lo que vendría.