Capítulo N° 00971 - ¡Buen Intento!

La batalla se prolongó hasta la noche. El número de miembros de la Raza Ósea disminuyó rápidamente, desde los más de dos mil, ahora solo hay varios cientos y el número sigue bajando. Sin embargo, solo quedan la mitad de los maestros de la alianza. Después de todo, saben que una guerra no tienen muchas esperanzas de sobrevivir. No importa si están en el Reino Trascendental o en el Reino Santo, en este tipo de combate cuerpo a cuerpo tumultuoso, la fuerza individual casi no importa, solo quiénes están en el Tercer Orden Santo se pueden mover sin escrúpulos. Pero luego de que Yang Kai se transformó en un Dragón Dorado, la sed de sangre de todos despertó, por lo que comenzaron a masacrar locamente a los invasores de las estrellas. El intenso calor ardiente es el némesis de la Raza Ósea y el calor que naturalmente desprende el Dragón Dorado, es suficiente para derretir a cualquier enemigo bajo el Reino Santo. Esto permitió que la situación cambiara gradualmente de un punto muerto equilibrado, a una matanza unilateral. Tan pronto como la alianza obtuvo esta ventaja, presionaron con fuerza, reduciéndolos a cerdos esperando su matanza.

Sin embargo, Yang Kai se sintió incómodo. Desde hace algún tiempo, buscó al líder de la Raza Ósea, Ke Luo, pero desde que comenzó la batalla, nunca apareció y al parecer, nadie sabe dónde está. Todos los presentes están ocupados luchando contra el enemigo frente a ellos, por lo que no tuvieron tiempo de prestarle atención. Así que Yang Kai voló hacia lo alto del cielo, ignorando toda la conmoción a su alrededor y liberó por completo su Sentido Divino para buscarlo. Es el más fuerte de los invasores de las estrellas, así que si no muere hoy, todo esto no tendrá sentido. De repente, frunció el ceño profundamente. Al parecer no está aquí, como si hubiese huido hace mucho. ¡No puede sentir su aura por más que lo intentó! Su corazón se hundió, pero al no creer en esta posibilidad tan ridícula, persistió. Después de un tiempo, finalmente encontró una pista.

Todos los maestros de la Raza Ósea, Humana, Monstruo y Demonio que murieron en este campo de batalla, fueron transformados en esencia vital que se hundió invisiblemente en el suelo antes de reunirse hacia cierto lugar, donde se esconde un aura formidable. ¡Ke Luo! Sin dudarlo, en su forma de Dragón Dorado, se transformó en un rayo de luz dorada y como si el sol mismo cayera del cielo, golpeó el suelo. La tierra tembló violentamente y luego de un resoplido frío, salió disparado Ke Luo desde las profundidades con un rostro teñido en una luz roja inusual. De pie en el aire mirando a la multitud de abajo, sus ojos verdes y llameantes están llenos de satisfacción y desdeño, mientras que una Energía asombrosa fluctuá a su alrededor. Yang Kai lo miró fijamente y sus instintos gritaron alarmados. ¡Algo está mal! De repente, una mano negra emergió del vacío y se aferró a Ke Luo. La cual se hizo cada vez más grande, como si pudiese agarrar al mundo entero. ¡Naturalmente está mano pertenece al Comandante Demoníaco! Sin embargo, a Ke Luo pareció no importarle.

"¡Zhang Yuan! ¡Retrocede!" Gritó rápidamente.

Desafortunadamente, su grito lo alcanzó demasiado tarde. Zhang Yuan es el Comandante Demoníaco, el maestro más fuerte de la Tierra Demoníaca, por lo que obviamente tiene absoluta confianza en su propia fuerza. Pero justo cuando se aferró a Ke Luo, sintió que su mano fue perforada, por lo que rápidamente la retiró. Al momento siguiente, desapareció y reapareció junto a Yang Kai, con una expresión increíblemente solemne, con su mano derecha sangrando y con un potente hedor a muerte envuelto alrededor de su brazo. ¡En solo un instante fue herido! Debido a esto, sintió una densa sensación de terror y rápidamente circuló su Energía Demoníaca para expulsar la malévola Energía que Ke Luo inyectó en su brazo. De repente, en un destello de luz, aparecieron, Li Rong, Meng Wu Ya, Chu Ling Xiao y el Dragón Trueno Llama Escarlata. Los maestros Santos de la Raza Ósea casi habían sido eliminados por completo y los cultivadores restantes del Reino Trascendental están huyendo. Así que la alianza los persiguió, prometiendo no dejar que ninguno escapara con vida. Solo las principales potencias se quedaron para lidiar con Ke Luo.

"¿Alcanzó el Reino del Santo Rey?" Meng Wu Ya exclamó con asombro. Está más claro que nadie sobre la fuerza de Zhang Yuan, después de todo, lucharon hace cientos de años. Así que podía ser comprensible que algún otro maestro del Tercer Orden Santo fuese herido tan fácilmente, pero él no. Sin embargo, sucedió. Esto quiere decir que la fuerza de Ke Luo está por encima de todos los presentes, de hecho, frente a tantos enemigos poderosos, no mostró signos de pánico.

"¡Aún no! ¡Pero está a punto de conseguirlo!" Respondió Yang Kai en su forma de Dragón Dorado. El aura de Ke Luo es realmente impresionante, significativamente más potente que cualquier otra persona que haya conocido, pero definitivamente no ha llegado aún al Reino del Santo Rey porque su fuerza aún fluctuá salvajemente, una clara señal de un avance inminente.

"¡Debo agradecerles!" Ke Luo miró a la multitud con arrogancia y habló con una voz fría. "¡Gracias a sus esfuerzos, he obtenido esta oportunidad! Si no fuese porque tantos maestros han muerto aquí, ¡nunca habría podido atravesar al Reino del Santo Rey tan rápidamente! Hace miles de años, tenían a un poderoso Santo Rey el cual masacró a los líderes de mi Raza, pero ahora, ¡me gustaría saber como planean enfrentarme con sus mediocres cultivos!" Después de ese gran grito, una gran fuerza de succión brotó de su cuerpo, como un vórtice invisible que giraba locamente. Entonces, la esencia vital de los innumerables cadáveres comenzó a fluir hacia él a un ritmo visible a la vista. Ríos de sangre y carne se vertieron en su cuerpo, transformándose en su propia fuerza, alimentado su impulso cada vez mayor. ¡Lo más vergonzoso es que la mayor parte de la sangre fresca proviene de los maestros fallecidos de la alianza! ¡De repente, el cielo se nubló, anunciando su avance!

"¡Desde el principio, este fue su objetivo!" Chu Ling Xiao gritó. Al escucharlo, los maestros presentes revelaron expresiones sombrías, comprendiendo sus palabras. La Raza Ósea defendió sin temor la arremetida de la alianza, por lo que pensaron que los invasores de las estrellas eran demasiado confiados. Pero ahora, se dieron cuenta que a Ke Luo no le importaban en absoluto las vidas de su Raza. Los últimos seis meses aumentó sus números solo para obligar a las tres Razas a enfrentarse a él. ¡Debido a esta guerra, muchos morirían en grandes masas! Estaba esperando la oportunidad para obtener una gran cantidad de esencia vital. Después de todo, entre los muertos hay muchos del Reino Trascendental y bastantes del Reino Santo. Con una cantidad tan grande de Energía vital inyectándose en su cuerpo, no tendrá problemas para abrirse paso. Fue todo un engaño. ¡Pensaron que tenían una victoria fácil mientras Ke Luo se estaba fortaleciendo!

"¡Pueden exterminar a todos los miembros de mi Raza si así lo quieren! ¡Mientras viva, puedo crear a tantos como yo quiera! ¡Jajaja!" Parecía pensar que ya había ganado, volviendo su cabeza hacia el cielo y soltando una risa estridente y victoriosa.

El rostro de todos se oscureció al instante, mientras miraban el aterrador remolino de Energía del Mundo acumulándose en el cielo. Naturalmente estaba a punto de recibir un bautismo, el que le permitirá abrirse paso hasta el Reino del Santo Rey. Cuando eso ocurra, ninguno de los presentes podrá enfrentarlo. ¡Es muy posible que sean convertidos en polvo!

"¿Planeas seguir viviendo?" Yang Kai regresó a su forma original y miró a Ke Luo con frialdad, revelando una sonrisa en su rostro. "¡Qué iluso eres!" Al decir eso, convocó una piedra roja oscura del tamaño de un puño desde el espacio de su Libro Negro. Vertiendo su Verdadero Qi en ella, e inmediatamente liberó una luz roja brillante y una fuerza de atracción impresionante, muchas veces más potente que la que emite Ke Luo. Entonces la sangre fresca que se estaba reuniendo en el líder de la Raza Ósea se congeló al instante y como si fuese agarrada por una gigantesca mano, comenzó a fluir hacia la piedra roja, siendo absorbida. Ni una sola gota de esencia vital llegó a Ke Luo. De modo que la fuente de Energía que utilizaba para abrirse paso se cortó abruptamente.

"¡Una Piedra Esencia de Sangre!" Sus ojos verdes temblaron violentamente, gritando alarmado, revelando indicios de pánico. "¡¿Cómo es posible que tengas una de esas cosas?!" En ese momento, incluso el poderoso Ke Luo parecía tenerle miedo a esa piedra extraña.

Sonrió burlonamente. "Entonces, ¿ahora te abrirás paso?" Como si hubiese respondido al eco de sus palabras, la Energía del Mundo en lo alto del cielo comenzó a dispersarse. Ke Luo levantó la cabeza y supo que ya no tenía esperanzas de abrirse paso, por lo que finalmente entró en completo pánico. Mientras tanto, Yang Kai se aferró con fuerza a la Piedra Esencia de Sangre, vertiendo constantemente su Verdadero Qi en ella, para absorber hasta la última gota de esencia vital y sangre fresca en un radio de docenas de kilómetros circundantes, negándose a darle a su enemigo ni una sola oportunidad. Continuando con sus burlas, preguntó. "¿Qué pasa? ¿Estás asustado?"

Los ojos de los maestros a su alrededor se iluminaron al sentir nuevamente la esperanza de acabar con la Raza Ósea. Todos ellos se regocijaron. Si Yang Kai no hubiese descubierto rápidamente el rastro de Ke Luo, después de haber reunido la suficiente Energía, nadie podría haberlo detenido.

Entonces, Ke Luo emitió una espesa intención asesina y lo miró rechinando los dientes. "¡Incluso si no llegué al Reino del Santo Rey, ninguno de ustedes es mi oponente! ¡Luego de matarte tomaré esa maldita Piedra Esencia de Sangre y me abriré paso!" Dicho esto, libertó una potente y sombría Energía Espiritual que voló hacia el Mar de Conocimiento de Yang Kai, claramente con la intención de extinguir su Alma de un solo golpe. ¡Quiere terminar con él lo antes posible!

Sin embargo, al darse cuenta que es un ataque solo de Sentido Divino, Yang Kai no mostró temor y en cambio se mantuvo firme. "¡Buen intento!" Rugió desatando su Sentido Divino Conflagrado e incineró al instante la Energía Espiritual malévola antes de que pudiese alcanzarlo.

Ke Luo se sorprendió por esto, pero sin detenerse un instante, levantó su mano y lanzó un ataque de palma. Una mano esquelética apareció de repente, como si fuese la mano de la muerte misma, haciendo que todos se estremecieran. Parecía enorme y tan dura como el jade más puro, emitiendo un poder extraño y una presión aterradora, mientras que los cinco dedos se curvaron como ganchos presionando hacia Yang Kai. El mundo circundante aparentemente no pudo soportar tal presión, por lo que comenzó a agrietarse y a colapsar, de modo que una huella de palma apareció en el suelo.

"¡En tus sueños!" Li Rong gritó y su hermoso rostro se llenó con sus densas Crestas Demoníacas, dándole una apariencia salvaje, mientras que su poderosa Energía Demoníaca se desbordó de su tierno cuerpo y se disparó como una flecha para bloquear el ataque en dirección a su Maestro. Yang Kai por otro lado invocó su Artefacto de rango alto grado Santo, la Hoja Plateada y lo transformó en un escudo de plata para también bloquear el ataque que se aproxima.