Capítulo N° 01629 - Arresto Domiciliario

Ran Yun Ting quedó aturdida. Desde que trajo a Su Yan al Valle Corazón de Hielo hace casi treinta años nunca la había visto sonreír. Hoy fue la primera vez. Esta repentina risa floreciente formó un contraste diametralmente opuesto en la fría e indiferente joven, combinado con su belleza hizo que su Maestra quedara estupefacta por un momento, lo que hizo que un sentimiento de inferioridad brotara incontrolablemente en su corazón. Pero pronto, disipó todos estos pensamientos que la distraer y preguntó con un rostro extremadamente sombrío. "¿Tenías un hombre? ¿Desde cuando?"

"Desde hace mucho antes de conocerla a usted"

"¿Intimaste alguna vez con él?" Continuó preguntando, pero en respuesta, las mejillas de Su Yan se sonrojaron levemente mientras asentía. Al verla, el cuerpo de Ran Yun Ting tembló y casi perdió la capacidad de mantenerse en pie, lo que la hizo tropezar hacia atrás unos pasos antes de revelar una profunda mirada de decepción y una voz algo dolorida "¿Por qué nunca antes me mencionaste esto?"

"Porque nunca me lo preguntó" Se mordió ligeramente sus labios.

Suspiró. "No te pregunté porque tu aura es completamente pura, ¡así que asumí que mantenías tu inocencia! Pero si tuviste relaciones íntimas con ese hombre, ¿por qué no veo impurezas en tu aura?" Una mujer que tiene relaciones sexuales es inundada con la Esencia del Yang, la Energía que pertenece a los hombres, esta es la forma más fácil de saber si una mujer perdió su inocencia. Sin embargo, el aura de Su Yan sigue siendo pura, por lo que nunca soñó que no era virgen. "[¿Es por su Constitución Especial?]" Es una posibilidad ya que esto no fue innato y fue adquirido, así que tal vez cuando lo adquirió su aura se purificó. "¡Esto es un escándalo!" Apretó los dientes y gritó furiosa.

"Perdóneme si la he decepcionado" Bajó la mirada.

"¡Si hubiese sabido esto antes nunca te habría permitido cultivar ese Arte Secreto!" Luego de haber tenido tantas expectativas en Su Yan, ahora se siente desconsolada y todo su anhelo se convirtió en decepción. "¿Sabes que al cultivar el Corazón de Jade de Hielo Puro si te enamoras las cosas solo empeorarán? ¡Tu situación actual es demasiado grave! Pero si olvidas a ese hombre, puede que no pase nada, de lo contrario, ¡eventualmente perderás tu cultivo y te convertirás en un desperdicio!"

"Su discípula no lo sabía" Negó con su cabeza pero no mostró ningún temor. Desde que llegó al Valle Corazón de Hielo adoró a Ran Yun Ting como su Honorable Maestra, por lo que siguió todas sus instrucciones y cultivó todo lo que le enseñó. ¿Cómo habría podido hacer otra cosa? De hecho, fue solo hace unos días desde que sabe que Yang Kai está aquí que notó problemas con su Arte Secreto.

La expresión de Ran Yun Ting se oscureció al darse cuenta de la gravedad del problema y aunque está muy decepcionada por el ocultamiento de su discípula sobre su historia romántica, al final, sigue siendo muy optimista hacia ella, así que continuó hablando ansiosamente. "Su Yan, aún no es demasiado tarde. Corta tus lazos emocionales, de lo contrario tu cultivación seguirá retrocediendo y eventualmente te convertirás en un mortal común. Una vez que eso suceda, nadie podrá salvarte".

"¿Cortar mis lazos emocionales?" Levantó la cabeza y la miró a los ojos con una extraña luz antes de negar con mucha firmeza con su cabeza. "Perdóneme Maestra, pero no puedo hacer eso".

"¡¿Por qué?!" Se enfureció cada vez más.

Sonrió otra vez. "Si puedo verlo, incluso si me convierto en una mortal ordinaria, estoy dispuesta".

La miró sin comprender. "¿Estos son tus verdaderos sentimientos? ¿Estás segura de esto?"

"Estoy segura" Asintió.

"¿No te das cuenta que solo buscas felicidad temporal a expensas del futuro? Si te conviertes en un mortal ordinario, tu esperanza de vida será de menos de cien años, por lo que no pasará mucho antes de que te conviertas en una anciana marchita. Cuando eso suceda, ¿crees que ese hombre seguirá teniendo algún tipo de interés en ti? ¡Cuando eso suceda él simplemente te abandonará!"

Al escucharla, el tierno cuerpo de Su Yan tembló y reveló una pizca de miedo. Cuando Ran Yun Ting vio esto supo que tenía una oportunidad, pero antes de que pudiese decir algo, el miedo en los ojos de Su Yan desapareció. Entonces, extendió su mano y se apartó el cabello detrás de la oreja antes de susurrar. "Si puedo volver a estar con él, estoy dispuesta a eso. Cuando llegue ese momento, solo me iré antes de envejecer para que no tenga que mostrarle una apariencia tan desagradable".

"¡Estás loca!" Su pecho subió y bajó violentamente sin haber sabido que su discípula es irracional.

"¡Maestra, debo salir!" Dijo rápidamente.

"¿Quieres ir a buscarlo?" La miró con fríaldad. Antes pensaba que Su Yan quería salir en busca de alguna oportunidad para romper su actual cuello de botella, pero ahora, ¿cómo no podría entender sus verdaderas intenciones? ¡Obviamente quiere ir en busca del hombre dibujado en el retrato!

"Sí, por favor permítalo" No intentó negarlo.

"¡En tus sueños!" Resopló. "A partir de ahora, permanecerás en la Isla Interior y no podrás dar un solo paso afuera. Yo misma encontraré una forma de resolver esto, ¡no me decepciones más!"

"¡Pero Maestra!" Objetó ansiosamente.

En respuesta gritó bruscamente. "¡Entren!"

Tan pronto su voz cayó, dos mujeres del Primer Orden del Regreso al Origen entraron antes de inclinarse y ahuecar respetusamente sus puños. "¿Cuáles son sus órdenes Gran Anciana?"

"Lleven a Su Yan a su residencia y no la dejen salir. ¡Si sale sin mi permiso las haré responsables!"

Al escucharla las dos mujeres revelaron expresiones de asombro ya que ninguna entendió que fue lo que Su Yan hizo como para enojar tanto a la Gran Anciana. Después de todo, Ran Yun Ting siempre ha estado muy orgullosa de ella diciendo en reiteradas ocasiones que aceptarla fue la mejor decisión que tomó en su vida. Es por eso que Su Yan definitivamente era una de las mejores candidatas para convertirse en el futuro pilar del Valle Corazón de Hielo. Pero ahora, obviamente la enfureció hasta el punto de ponerla bajo arresto domiciliaria. ¿Qué pasó exactamente? Pero por supuesto ninguna de las dos se atrevió a preguntar, simplemente miraron a Su Yan. "Hermana Menor Su, por favor".

"Maestra..." Su Yan la miró de manera suplicante esperando que cambiara de opinión.

"¡Llévensela!" Ran Yun Ting le dio la espalda y gritó como si nunca más quisiera volver a verla.

"Hermana Menor Su, por favor..." La más alta de las mujeres frunció el ceño con impaciencia.

Su Yan miró la espalda de su Maestra y suspiró suavemente, sabiendo que nada funcionaría, así que se inclinó levemente, se dio la vuelta y salió. Pronto, solo Ran Yun Ting quedó en la sala y mientras miraba el retrato colgado en la pared sus ojos se volvieron ardientes, como si quisiera cortar a ese hombre en mil pedazos. De hecho, agitó su mano y convirtió el retrato en polvo. "¡Pequeño mocoso reza por que no caigas en mis manos o definitivamente te mataré!" Declaró con saña. Con tal de rectificar el corazón puro de Su Yan, no dudará en matar a Yang Kai. ¡Si Su Yan no está dispuesta a cortar sus lazos emocionales, entonces su Maestra lo hará por ella! Mientras ese bastardo muera, el camino de su discípula no se verá más obstaculizado, por lo que no sufrirá más con el Arte Secreto Corazón de Jade de Hielo Puro. Quizás esté triste y decepcionada por un tiempo, pero Ran Yun Ting cree que con los años estará agradecida. Después de pensar esto, abandonó rápidamente su sala y se dirigió a cierta cima montañosa en donde la Anciana Suprema está recluida ya que tiene que preguntarle sobre este asunto. Una vez que obtenga su asentimiento, no tendrá preocupaciones.

•••
La Isla Interior tiene muchos caminos que se cruzan y conducen en todas direcciones. Muchas de las discípulas del Valle Corazón de Hielo caminan por estos senderos entre los edificios únicos tallados en hielo puro y cristalino. En estos momentos Su Yan camina por uno de ellos sintiéndose frustrada, en dirección a su habitación paso a paso, mientras que las dos mujeres responsables de vigilarla la siguen de cerca intercambiando mensajes de Sentido Divino entre sí. "<Hermana Mayor Zhou, ¿qué error crees que cometió Su Yan para enfurecer a la Gran Anciana hasta este punto.>" Preguntó.

La mujer de apellido Zhou resopló con frialdad en secreto. "<La Gran Anciana no lo dijo, ¿cómo se supone que lo sepa? Pero sea lo que sea, ciertamente no es un asunto trivial. De lo contrario, no le impedirían siquiera salir. Esta niña simplemente no conoce la inmensidad de los Cielos. Desde que entró en la Secta nos ha menospreciado a todas nosotras, ni siquiera le da la cara a sus Hermanas Mayores. Si te la encuentras, ni siquiera saluda ni tampoco muestra ningún tipo de cortesía.>"

"<Es porque siempre ha confiado en el estatus de la Gran Anciana para hacer lo que le plazca, pero ahora que ofendió a su Maestra, veremos si se atreve a actuar con arrogancia otra vez.>" Sonrió.

"<Como sus Hermanas Mayores, debemos enseñarle como comportarse.>" Las dos intercambiaron una mirada y sonrieron con complicidad ya que se sienten extremadamente felices en este momento como si el cielo se hubiese vuelto más brillante el día de hoy. Pero mientras caminaban, Su Yan se detuvo de repente y sus ojos se iluminaron, antes de que se fuese volando en cierta dirección. Las expresiones de sus dos vigilantes cambiaron dramáticamente ya que pensaron que ella intentaba escapar, pero al momento siguiente, aterrizó frente a otras discípulas. "¿Ahora qué?" Se apresuró.

Cerca de allí, algunas cultivadoras del Valle Corazón de Hielo hablan en voz baja revelando miradas confusas en sus rostros ya que no entienden porque Su Yan se acercó hacia ellas. La líder del grupo es una poderosa mujer en el Tercer Orden del Regreso al Origen, quién frunció el ceño mientras miraba el extraño comportamiento de la joven. "¿Tú no eres la discípula de la Gran Anciana Ran?"

"¿Ella es Su Yan?" Una de ellas preguntó confundida.

"Escuché que cuando llegó solo estaba en el Tercer Orden Santo pero ahora, en menos de treinta años está en la cima del Primer Orden del Regreso al Origen, si es cierto, es increíble..."

"Escuché lo mismo, así que debe ser verdad". El grupo la miró con curiosidad.

"Si, soy Su Yan" Asintió. "¡Saludos Hermanas Mayores!"

"¿Tienes algún asunto con nosotras?" Preguntó la líder.

"No, es solo que las acabo de escuchar hablar sobre la persona del retrato, ¿lo conocen?"

"¿Te refieres a este tipo?" Levantó el retrato y sonrió. "Claro que lo conozco".

Sus ojos se iluminaron antes de preguntar con urgencia. "¿Cuándo?  Él.... ¿está bien?"