Todos se miraron unos a otros en estado de shock y confusión, mezclado con una gran cantidad de agradable sorpresa. "Pre... Presidenta, ¿estas Escrituras realmente son de toda la Calle Dragón Ascendente?" Preguntó Gao Hong con una voz muy temblorosa ya que el valor de cada una de esas Escrituras es simplemente inestimable. Bajo el liderazgo de Hua You Meng, la Cámara de Comercio Cinco Caminos ha trabajado duro durante más de veinte años antes de finalmente comprar una pequeña tienda en esta calle y ni siquiera son los propietarios oficiales, simplemente inquilinos con un contrato de treinta años. No solo tienen que pagar una gran suma de dinero a la administración de la ciudad cada año, sino que les quitarán la tienda cuando termine el contrato. Pero ahora, una caja con más de treinta Escrituras cayeron en sus manos, por lo que cualquier comerciante sabría el enorme valor que tienen justo ante ellos, razón por la cual Gao Hong casi se desmaya de felicidad.
Las manos de Hua You Meng temblaban mientras revisaba la caja otra vez. "Si, es toda la calle..."
"¡Jajaja! ¡Es hora de que nuestra Cámara de Comercio Cinco Caminos ascienda!" Yao Qing acarició su cabeza calva demasiado emocionado para calmarse, revelando ojos brillantes y feroces al pensar en el futuro brillante que tienen por delante. "¡Esa maldita Cámara de Comercio Yuan Celestial de al lado siempre ha estado compitiendo maliciosamente con nosotros! ¡Pero veremos ahora que es lo que dicen! ¡Yo mismo los expulsaré de su tienda! ¡Jajaja! ¡Y esos bastardos de la esquina también desaparecerán! La última vez que fui a preguntar algo me expulsaron, ¡veremos ahora si se atreven a hacerlo! La próxima vez Hai Tang y yo les daremos una dura lección!" Hai Tang que está a su lado asintió muy vigorosamente, como si guardara un profundo rencor por lo que sucedió aquella vez.
"Solo los villanos buscarían venganza por algo tan insignificante" Xia Jing Wu lo miró, lo que hizo que Yao Qing sonriera con torpeza. En la Cámara de Comercio Cinco Caminos Xia Jing Wu tiene mucho prestigio y sus palabras a veces tienen más peso que las de la misma Hua You Meng.
"Tío Xia, ¿qué opinas..." Hua You Meng finalmente se recuperó de la conmoción y preguntó.
Este último se acarició la barba sin mostrar ninguna emoción y en lugar de eso frunció el ceño y reflexionó. Un momento después susurró. "Presidenta, él es la respuesta..." Diciendo eso hizo un gesto hacia el patio trasero. "Nosotros no somos la razón de lo que está pasando, la clave de todo es ese joven, por lo que debería preguntarle su opinión. Quizás nos ayude a tomar una decisión".
Lo pensó por un momento antes de asentir. "Bien, ustedes sigan con sus asuntos como de costumbre pero mantengan en secreto lo que sucedió hoy" Diciendo eso, como si el viento moviera sus pies, se apresuró a regresar al patio trasero y poco después entró al pabellón donde está Yang Kai sentado.
"¿Oh? Volviste" La miró sonriendo obviamente consciente de todo lo que ha pasado.
Sacó la caja de jade sin dudarlo y la colocó sobre la mesa frente a Yang Kai. "Joven Señor, esto es demasiado precioso como para que mi Cámara de Comercio Cinco Caminos lo disfrute. Mantenerlo probablemente nos provocará más desgracia que beneficios, así que espero que los acepte". Luego de recuperarse de la conmoción y emoción, gradualmente se dio cuenta que el hecho de que Lu Tian Feng les enviara esta caja llena de Escrituras se debía completamente a Yang Kai, por lo que si este último se va algún día, tales Escrituras se convertirán en un gran desastre para ellos. Un hombre corriente es inocente, pero sus tesoros lo pueden hacer culpable. En la ciudad, tales Escrituras son extremadamente raras y preciosas, por lo que correrán grandes riesgos teniéndolas con ellos.
La miró pensativamente. "Ya que te las dieron, deberías aceptarlas. En cualquier caso, no tienen absolutamente ningún valor para mí, así que incluso si las acepto, no me servirán de nada" Sonrió.
Reveló una sonrisa irónica. "Pero..."
Extendió su mano para interrumpirla. "Sin pero, aceptalas, yo soportaré las consecuencias".
Lo miró aturdida sin entender el tipo de compromiso que está haciendo, pero pronto la gratitud brotó en su corazón, respiró hondo y declaró. "Muchas gracias Joven Señor, entonces las aceptaré". Aunque su cultivo no es malo es una mujer de negocios en esencia, no puede rechazar las Escrituras
Sonrió. "Bien, pero me gustaría saber, ¿qué harás con esas Escrituras?"
"¿Qué haré con ellas?" Se congeló un momento antes de hablar. "Siempre he tenido un sueño, desde hace mucho quería tener las Escrituras de mi Cámara de Comercio Cinco Caminos, pero esta ciudad es tan cara que es demasiado difícil de adquirir. Nuestro plan original era pasar otros diez años para ahorrar los suficientes Cristales Santos y comprarla y luego usar esta tienda como base para desarrollar una gran Cámara de Comercio. Se que es un sueño infantil estar hombro con hombro con la Cámara de Comercio Heng Luo, pero espero estar lo suficientemente alto algún día para no ser intimidada por nadie". Mientras hablaba pareció soltarse de todas las ataduras y su bonito rostro se ruborizó lleno de emoción. "No es mi sueño personal, sino también el del Tío Xia, el de la Hermana Hong, de Yao Qing y de Hai Tang. Hemos trabajado duro por ese sueño, haciendo de todo, desde vender en las calles hasta vagar sin rumbo fijo para vender nuestros productos. Luego de ese tipo de vida, ¿quién no querría un lugar estable? Y ahora, ese sueño se cumplió fácilmente. Con estas Escrituras, puedo expandirme diez veces. ¡Podré vender mis productos por toda la ciudad!" Al final de su discurso sintió que su corazón se aceleraba y sus ojos brillaron como si pudiese ver el futuro brillante ante ella, haciéndola hundirse en un maravilloso sueño. No fue hasta que vio que Yang Kai la mira con una gran sonrisa que se sonrojó profundamente. "Perdón, dije cosas vergonzosas..."
"Para todos, los sueños son sagrados, ¿por qué me reiría del tuyo?" Habló con seriedad. "Presidenta Hua, veo que has trabajado muy duro y has luchado bastante en las últimas décadas, ¿no es así?"
"Si, pero gracias a la ayuda de mis Hermanos y Hermanas el peso no es tanto" Sonrió dulcemente, lo que deslumbró a Yang Kai por un momento. Percibiendo el cambio en sus ojos, Hua You Meng bajó la cabeza rápidamente y su corazón latió violentamente, sintiéndose bastante nerviosa esperando que él no se interesara repentinamente en ella. Sin embargo, cuando lo pensó de nuevo, no parecía mala idea llamar la atención de alguien tan joven y prometedor. Aunque no han estado en contacto mucho tiempo, está bastante orgullosa de su capacidad de leer a los demás. Yang Kai es diferente de otros Maestros del Reino Origen del Rey quiénes solo saben actuar de forma altanera y arrogante. No solo es accesible, su apariencia no está mal, tiene un rostro valiente y heroico y un cuerpo bien formado. "[¡¿En qué estás pensando?!]" Gritó para si misma sintiéndose bastante avergonzada.
"Veo que pareces tener un plan muy integral para el futuro, pero me pregunto si estarías dispuesta a escuchar mi consejo". No sabe lo que ella está pensando así que continuó la conversación.
"Usted es mi benefactor, obviamente lo escucharé" Rápidamente ajustó su expresión.
"No te quedes con esas Escrituras, véndelas todas" Dijo rápidamente.
"¿Ah?" Se sorprendió. Si le hiciera caso, su futuro desaparecerá y sus sueños no se harán realidad.
"Debes confiar en mi" La miró con sinceridad directamente a los ojos.
Al ser observada así se sintió nerviosamente. "Naturalmente confío en usted".
"Bien, no me conviene darte una razón específica, pero no puedes quedarte con esas Escrituras. Lo mejor es que las vendas lo antes posible. Algún día comprenderás por qué te doy este consejo". Vino a esta ciudad a robar la Insignia del Emperador Estelar, por lo que no hay duda que entrará en conflicto con la Estrella Púrpura. Cuando se sepa la verdad, la Cámara de Comercio Cinco Caminos se verá implicada. En ese momento, definitivamente no podrán quedarse en esta ciudad, por lo que las Escrituras se volverán inútiles, así que lo mejor es venderlas ahora mismo. Mientras tengan los suficientes Cristales Santos, podrán instalarse en cualquier otro lugar y sus futuros serán brillantes.
Aunque Hua You Meng no entiende la razón, después de calmarse y pensar por un tiempo, pensó vagamente en algo y su tierno cuerpo tembló, por lo que rápidamente asintió "Lo entiendo".
La miró profundamente y asintió. "Eres una mujer realmente inteligente".
"No es para tanto, solo sigo su consejo. Como sea, ¿puedo pedirle ayuda con algo?"
"¿Ayuda?" Sintió curiosidad.
"¿Podría acompañarme afuera?" Sonrió.
"¿Para qué?" Levantó una ceja.
"Bueno verá..." Explicó. "Son demasiadas Escrituras, por lo que si debo venderlas rápidamente no obtendré un buen precio, después de todo esto está más allá de mi capacidad. Sin embargo, puedo llevarlas a la Casa de Subastas Cielo Claro para que ellos las procesen por mi, de esta manera, las subastarán en nuestro nombre, permitiendo obtener muchas ganancias sin correr tantos riesgos".
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