Yang Kai les devolvió el gesto indicándoles que se sentaran. "¿Han venido por la Alquimia?"
Los cinco asintieron con sus cabezas al unísono.
"Bien, por favor entreguen las hierbas que han preparado y díganme que píldoras necesitan refinar. El refinamiento llevará algunas horas". Sin embargo, al ver su expresión tan casual, los cinco entrecerraron sus ojos y ninguno se mostró dispuesto a dar el primer paso. "¿Qué sucede? ¿Han venido a solicitar Alquimia sin siquiera traer las hierbas necesarias?"
"Naturalmente preparamos los materiales requeridos, pero... Maestro Santo, perdone la pregunta, ¿qué tipo de tasa de éxito tiene el Gran Maestro de Alquimia que reside en su honorable Secta al refinar píldoras de grado Santo?" Uno de los Santos preguntó.
"Tiene una tasa de éxito del cien por ciento" Sonrió.
La expresión de las cinco personas se tensó, aparentemente no están convencidos. Incluso la mujer que había visto las Venas de Píldora se mostró igual. Después de todo, ningún Alquimista podría garantizar una tasa de refinamiento del cien por ciento de éxito, independiente de su habilidad, ya que fracasar, es el riesgo natural que viene con la Alquimia. A menos que estas palabras viniesen de la boca del Viejo Hombre de la Fortaleza del Cielo, nadie las creería. ¿Este nuevo Maestro Santo dice esas cosas ya que sigue siendo muy joven? Comenzaron a tener dudas.
"¿Qué significan sus expresiones?" Xu Hui pudo ver las miradas de desconfianza y vacilación en los rostros de estas personas, por lo cual se mostró bastante insatisfecho. "¿Dudan que el Alquimista de Tierra Santa pueda refinar las píldoras de grado Santo que necesitan?"
"¡No nos atreveríamos!" La expresión del otro Santo cambió. "Es solo que recolectar estos materiales de grado Santo fue un proceso largo y difícil, así que si el refinamiento falla, recolectarlos no será simple. Bajo estas circunstancias, actuar con cautela es completamente razonable, así que les pido por favor, Maestro Santo, Gran Anciano, no se ofendan".
Yang Kai asintió. "Actuar con cautela es realmente comprensible, pero cuando le pides a un Alquimista que refine una píldora, siempre existe el riesgo de fallar. Aunque eso es cierto incluso aquí, puedo asegurarte que la refinación de Tierra Santa conlleva el menor riesgo. Además, incluso existe la posibilidad de que obtengan algunas ganancias inesperadas".
"¿Venas de píldora?" Al escucharlo, los ojos de todos brillaron.
La mujer de mediana edad fue la más decisiva, por lo que rápidamente se puso de pie. "Como nadie más está dispuesto, yo iré primero. No estoy aquí para solicitar una píldora de grado Santo, sino que de rango alto grado Espíritu, por lo que incluso si falla, recolectar los materiales necesarios no es demasiado difícil. Además de eso, dado que se ha prometido una compensación por las pérdidas, realmente no existe ningún riesgo" Diciendo eso, sacó las hierbas que trajo.
Los otros cuatro parecían estar dudando, aparentemente desean ver qué tipo de habilidad posee el Alquimista de Tierra Santa antes de tomar una decisión. Al comprender sus pensamientos, Yang Kai no les prestó atención y simplemente asintió antes de irse junto a Xu Hui, mientras que las cinco personas continuaron esperando en la sala de recepción.
Después de media hora, Xu Hui reapareció con una evidente expresión de orgullo en su rostro. Al ver su mirada, los cinco clientes se levantaron rápidamente y lo observaron, preguntándose cuál fue el resultado. El Gran Anciano arrojó la botella de inmediato y dijo en voz alta. "¡Comprueba por ti mismo el nivel que posee el Alquimista de Tierra Santa!"
Atrapando el frasco, la mujer de mediana edad lo abrió apresuradamente y sacó una píldora pequeña de color azul marino. Al siguiente instante, exclamó. "¡Tiene Venas de Píldora!" ¡Esta píldora de rango alto grado Espíritu realmente tiene Venas de Píldoras por lo que aumentó instantáneamente su valor varias veces! La mujer sonrió ampliamente sosteniéndola en su mano.
Los dos maestros del Reino Santo intercambiaron una mirada, viendo la sorpresa aparente en los ojos del otro. Si los rumores son ciertos, ¡las cuatro píldoras que han sido refinadas públicamente han tenido Venas de Píldoras! Algo que supuestamente solo puede ser obtenido por suerte. Por lo general, incluso los Alquimistas de grado Santo de fama mundial tienen que pasar décadas refinando píldoras constantemente para que aparezca una sola con Venas de Píldoras. Sin embargo, aquí en Tierra Santa, parecen ser la norma. ¿Cómo podría no ser un asunto sensacional?
"¡Hmph! El Maestro Santo dijo que hoy el Gran Maestro está de buen humor, así que deben darse prisa mientras puedan. Si más tarde su estado de ánimo cambia, es posible que ya no esté dispuesto a refinar nada". Explicó Xu Hui de manera ambigua.
"¡Gran Anciano! ¡Por favor pídale al honrado Gran Maestro de su Secta que nos ayude!" Los cuatro dejaron de dudar y cada uno de ellos luchó por entregarles sus hierbas en posición, temerosos de que este misterioso Gran Maestro realmente cambiara de humor y se negara a hacerlo. Si pudo refinar tantas píldoras de rango alto grado Espíritu con Venas de Píldoras, obviamente es completamente capaz de refinar píldoras de grado Santo.
Xu Hui no se molestó con ellos, simplemente aceptó sus hierbas y el pago de la mujer de media edad antes de salir tranquilamente de la habitación nuevamente. Tierra Santa ya no puede seguir trabajando gratis, por lo que es hora de empezar a cobrar. La mujer preparó honestamente la cantidad adecuada de remuneración, lo suficiente para igualar el valor de la píldora que solicitó.
Después de una hora, Xu Hui regresó nuevamente, trayendo consigo dos botellas de jade y entregándoselas a los dos cultivadores del Reino Trascendental. Aunque ninguna de esas dos píldoras tiene Venas de Píldoras, siguen siendo de una calidad excelentes, por lo que a pesar de que se mostraron un poco defraudados, se sintieron bastante satisfechos, de modo que pagaron lo requerido antes de irse. Ahora, solo los dos Santos permanecieron dentro de la habitación, esperando ansiosos. Ambos se sientes como si estuviesen sentados sobre alfileres y agujas, por lo que se levantaron y caminaron de un lado al otro, orando en silencio para que el Gran Anciano regresara rápidamente con las píldoras que solicitaron. Sin embargo, saben que refinar una píldora de grado Santo es muy diferente a refinar píldoras de grado Espíritu. Existe una gran diferencia en el tiempo y en la Energía consumida para hacerlo, por lo que sus ansiedades fueron inútiles. Sin embargo, la inquietud que sienten es tan grande, que no pudieron eliminarla.
Un rato después, dentro de la Corte Santa, Yang Kai convocó a Xu Hui quién ha estado esperando afuera. Al entrar, inmediatamente olió una rica fragancia medicinal, por lo que miró a su alrededor con curiosidad. Después de todo, él también quiere saber la identidad de este misterioso Gran Maestro de la Alquimia que está ayudando a Tierra Santa. Desafortunadamente, sin importar todo lo que intentó para descubrirlo, no notó a nadie más.
"Las píldoras ya están refinadas, puedes llevártelas, pero no se las entregues todavía. Espera hasta mañana por la mañana al menos".
Al escucharlo, tomó las dos botellas y lo pensó por un momento antes se asentir. "Maestro Santo, ¿quiere que piensen que refinar píldoras de grado Santo no es tan simple?"
Yang Kai simplemente lo miró y sonrió significativamente. "¡Solo quiero hacerles saber que dudar del nivel del Alquimista de Tierra Santa tiene consecuencias!"
Xu Hui sonrió con ironía, pero no dijo nada, solo continuó mirando a su alrededor.
Al verlo sonrió. "¿Estás buscando al Gran Maestro?"
Sonrió tímidamente. "Si es que puedo preguntar... Maestro Santo, ¿cuándo llegó ese Gran Maestro a Tierra Santa? ¿Por qué se esfuerza tanto por ayudarnos? Independiente de cualquier cosa, como Gran Anciano de la Secta, lo mínimo que debo hacer es darle las gracias".
"¿Quieres saber quién es?" Lo miró con una sonrisa.
"Si" Asintió con firmeza.
"¿Me creerías si te dijera que yo refiné todas esas píldoras?"
"Por favor no bromee así..." Reveló una mirada de incredulidad. "Maestro Santo, se que siendo tan joven usted ya alcanzó el Tercer Orden de Trascendencia, por lo que es un verdadero dragón entre los hombres con un potencial ilimitado. Sin embargo, si dice que también es tan hábil en la Alquimia... bueno... Je, no puedo creerle. Todos los Grandes Maestros que son capaces de refinar píldoras de grado Santo se han sumergido en el Camino Alquímico durante al menos cien años. Usted es demasiado joven, así que sería imposible que pudiese hacerlo".
"¡Si no me crees, entonces lárgate!" Respondió indignado.
"¿Ah?... yo... pero..." Quedó atónito, sintiendo aún más curiosidad sobre la identidad de este Gran Maestro de la Alquimia, pero al ver la actitud de Yang Kai, decidió no presionarlo.
A la mañana siguiente, Xu Hui entró en la sala de recepción. Al ver los ojos rojos de los dos Santos, supo que pasaron toda la noche preocupados, por lo cual sonrió en secreto. Cuando lo vieron, corrieron hacia él preguntando ansiosamente. "Gran Anciano... ¿qué sucedió?" Mientras los dos hablaban con vacilación, revelaron miradas de miedo y nerviosismo, profundamente asustados de que el Gran Anciano les diera malas noticias. Los maestros de su nivel y estatus, generalmente tienen muchos recursos, por lo que no les importan las simples Piedras de Cristal. Pero como dijeron antes, recolectar tantos materiales de grado Santo no es una tarea fácil. Incluso algunos de ellos no se pueden comprar sin importar la cantidad de dinero que tuviesen, por lo que fueron obligados a deambular por montañas, ríos y desiertos para encontrarlos. Por lo que si la refinación falla, aunque Tierra Santa los compense, no significa que les darán una copia exacta de las hierbas que trajeron, sino que probablemente la compensación se medirá en Piedras de Cristal. Así que si quisieran intentarlo nuevamente, tendrían que comenzar a recolectar desde cero.
Al ver sus expresiones, Xu Hui sintió una inexplicable pizca de placer antes de declarar con aires de suficiencia. "El Gran Maestro Alquimista de Tierra Santa tomó medidas personalmente, ¿cómo podría ser algo más que un éxito? Realmente no se por qué están tan preocupados".
"Eso significa..."
"¡Vean por ustedes mismos!" Les entregó una botella de jade a cada uno. "Si alguna vez necesitan refinar otra píldora de grado Santo, ¡recuerden venir directamente a visitarnos!"
Ambos Santos abrieron apresuradamente las botellas de jade y vertieron la píldora en su interior, revelando una expresión de asombro. "¡Los medios del honorable Gran Maestro de Tierra Santa son realmente asombrosos! ¡Sin duda la próxima vez que necesite de los servicios de un Alquimista vendré aquí! ¡Tengo muchos amigos que necesitan los servicios de un Gran Maestro Alquímico, por lo que les diré que vengan sin dudarlo!" El otro Santo también intervino, diciendo que recomendaría Tierra Santa a todos sus amigos y familiares.
capitulos nuevoooooooosssssssss!!!!!!!!...gracias por la felicidad que nos entregas
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